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CELEBRACIONES Y BALANCE DE FIN DE AÑO
Esther Morales León
Psicóloga Clínica y Educacional – Chile
www.esthermorales.cl
Nuestra vida esta compuesta de ciclos, así como la Naturaleza y también el Universo, porque somos un microcosmos dentro de un monumental y cuántico espacio-tiempo. Este ciclo social llamado año, está a punto de terminar y marcamos este final con múltiples actividades, que nos hacen correr y estresarnos, cuando en realidad el tiempo solo transcurre, sin límites de ningún tipo.
Dos celebraciones importantes, marcarán el fin de este ciclo anual : la Navidad y El Año Nuevo, la primera más íntima y familiar, la segunda más expansiva y colectiva. La Navidad generalmente es vivida como una íntima y privada experiencia, celebrando en general a través de una cena con los miembros de nuestra familia, donde confluyen varias generaciones y además donde nos permitimos recordar a aquellos que viven lejos o que ya partieron. En Occidente, esta fecha tan especial lamentablemente está marcada por el consumismo, donde lo más importante, son los regalos materiales que se entregan a todos los cercanos, no sólo a los niños como se debería, y el Viejito Pascuero opaca la conmemoración espiritual, del nacimiento de Jesús.
Esta celebración de Navidad nos debería permitir mirarnos en el aspecto personal y familiar. En el aspecto personal sería bueno hacer una revisión o balance de todo lo bueno y lo malo que ocurrió durante el año, en el caso de lo bueno para agradecer y en el caso de lo malo, para visualizar posibles cambios en el futuro o año que se inicia. Navidad es la mejor ocasión para revisar la conducta personal que hemos tenido con aquellos seres consanguíneos, que conforman nuestro grupo familia, abuelos, padres, hermanos, hijos, así como también con nuestras parejas, amigos más cercanos, compañeros de trabajo, vecinos, etc., nuestra forma de darles afecto, apoyo, cuidados, o por el contrario, nuestras rabias, egoísmos, discusiones, rencores, distanciamientos, ausencias y todo tipo de desamor.
El Año Nuevo es una evento de tipo social y colectivo, donde se celebra la partida del Año Viejo y la llegada de uno Nuevo, mediante fuegos artificiales, fiestas, cenas en restaurantes, bailes y alcohol, muchos querrán celebrarlo y están en su legítimo derecho, sin embargo el fin de este ciclo anual, sobre todo nos debiera llevar a mirar como fue al año que pasó, para nuestro país y para el mundo, es común que los canales de televisión, hagan un recuento más bien de lo malo que ha ocurrido, lo más sensacionalista, sin embargo pasaron muchas cosas buenas : avances científicos, acuerdos comerciales, la exploración del espacio, iniciativas de energías limpias, protección de especies en peligro de extinción, vehículos eléctricos, etc.
Nuestro planeta está viviendo un cambio climático de grandes proporciones, el calentamiento global derrite los polos, aumenta el nivel del mar, produce grandes sequías e inundaciones, sin embargo los gobiernos no logran comprometerse en acciones concretas para disminuir el riesgo de un colapso. En respuesta, miles de personas se han organizado a través de las redes sociales, para realizar acciones ecológicas voluntarias, como plantar árboles, limpiar ríos, mares y playas, hacer cultivos orgánicos, muchos participan en organizaciones de protección animal, dejaron de comer carne, reciclan, hacen compost, usan productos más ecológicos, evitan marcas que hacen testeo animal (cruelty free), etc.
Después de los dramáticos hechos vividos en los últimos años, tales como el estallido social y la pandemia de Covid, los chilenos queremos una importante renovación y cambio en nuestra sociedad, necesitamos una nueva Constitución más moderna y adaptada a una nueva realidad, pero después de dos plebiscitos aún no tenemos una que nos satisfaga, también queremos que los miembros del poder legislativo de cada Región y sobre todo de cada Comuna, sean personas con vocación social, intachables en su conducta ética y moral, capaces de representar las necesidades de la gente y luchar por ello. El presidente actual y sus ministros tiene como tarea escuchar, respetar y movilizar los cambios urgentes que necesita un Chile moderno e inserto en un mundo cambiante y lleno de desafíos. Igualmente cuatro años es un periodo de gobierno muy corto y tal vez los cambios que se inicien, tardarán tiempo en realizarse.
En todo el planeta, son muchos quienes están despertando a una nueva conciencia, está surgiendo un anhelo de paz, de integración entre las naciones, la urgente necesidad de proteger a la Naturaleza y sus especies, el uso de nuevas formas de energía, crear una economía equilibrada, que permita a todos un hogar y una subsistencia digna, evitando el acaparamiento de riqueza en manos de unos pocos. También muchos aprenden a conectar con su ser interior, encuentran a Dios en su corazón, no necesitan religiones, ni dogmas, ni tabúes.
Esta Navidad y Año Nuevo, estoy segura de que muchos viviremos dos celebraciones distintas a las de años anteriores : seremos menos consumistas con una sensibilidad nueva, le daremos más valor a nuestros seres queridos, pensaremos en quienes nada tienen y agradeceremos por todo lo que la vida nos ha dado y que pocas veces nos detuvimos a considerar, también intencionaremos el fin de la guerra de Ucrania y la que ocurre en la Franja de Gaza, así como el término de todos los gobiernos totalitarios que oprimen a su gente.
Los cambios en el mundo continuarán y muy rápido, los cambios personales también, sólo debes mantenerte tranquilo(a), evita impactarte con noticias catastróficas, no tengas miedo, todo lo que está ocurriendo tiene un sentido, añade tu importante grano de arena a este cambio. Agradece por estar aquí y ahora, en este momento tan crucial de nuestra evolución como especie humana, tienes el privilegio de ser un protagonista en la sanación de nuestro amado planeta y la integración de las conciencias individuales que poco a poco, paso a paso, nos hará sentirnos UNO con los otros, con el reino mineral, vegetal, animal y porqué no decirlo con nuestro sistema solar, con la galaxia y con todo el Universo.
EJERCICIOS SUGERIDOS
Muy cerca de fin de año, toma un cuaderno o libreta y anota en una página todas las cosas buenas que te ocurrieron en el año 2023, agradece por todas ellas y agradécete a tí mismo(a), por permitir que ellas ocurrieran. En otra página registra todo lo malo o negativo que viviste este año, destacando aquello en que tuviste una cuota de responsabilidad, dobla esta página quémala o sumérjela en agua, para después botarla en el desagüe.
Finalmente y en otra página de tu cuaderno, escribe todos tus mejores anhelos, sueños y proyectos para el año 2024, con mucha fé y la decisión de hacer todo lo posible para que ellos se concreten o empiecen a hacerlo. Puedes escribir :
YO……..tu nombre completo, HOY….fecha, EN ARMONIA Y DE ACUERDO A LA VOLUNTAD DIVINA, QUIERO PIDO Y DECIDO………. anota tus deseos uno a uno, termina escribiendo abajo , QUE ASI SEA, ASI ES Y ASI SERÁ.
En otro momento, siéntate en un espacio al aire libre, (patio, parque, plaza) ojalá rodeado de vegetación, mira hacia el cielo y recuerda que eres parte de algo superior, mira y toca la tierra, recuerda que ella es tu madre, ahora cierra los ojos, siente tu corazón latir en el pecho y agradece por tu vida, por ser quien eres – único e irrepetible y por todas la cosas buenas que te rodean.
Respira profundamente, siente tu campo de energía alrededor de tu cuerpo, expándelo y repite tres veces “YO SOY”, rodéate del color violeta, para transmutar todo lo negativo que tuvo este año para ti y luego de un radiante color blanco, para que puedas brillar y estar protegido(a). Luego prométete a tí mismo(a), ser cada día una mejor persona y ayudar en este cambio fundamental que vive hoy la humanidad, porque tú eres parte de ella y un habitante de un planeta, único y maravilloso.
